Asahi y yo hemos estado casados durante varios años, ella es ama de casa y yo trabajo como editor de una revista en una editorial. Me gusta mucho tomar fotografías y, a menudo, tomo fotografías de mi esposa. También guardo una foto de ella en mi escritorio para darme más motivación para esforzarme. El jefe Ikeda también vio accidentalmente la belleza de mi esposa y quedó asombrado. Esta vez mi jefe invitó al famoso fotógrafo Toshiki Sayama a tomar fotografías para la revista y también me dio la oportunidad de trabajar con él. El Sr. Sayama es famoso por muchas obras, pero las más famosas siguen siendo sus obras artísticas de desnudos. Esta vez, la empresa también firmó un contrato para que el Sr. Sayama tomara fotografías desnudo. Estoy muy emocionado de trabajar con él y tratar de prepararme bien. Sin embargo, el día de la filmación, nuestra modelo femenina de repente no pudo ser contactada. Tampoco pude encontrar a nadie más que me reemplazara mientras llegaba el Sr. Sayama. El jefe Ikeda siguió regañándome y, temiendo que el Sr. Sayama se enojara, me obligó a llamar a mi esposa para que fuera modelo de reemplazo. Tuve que llamar a mi esposa para que me ayudara. La sesión de fotos transcurrió con normalidad, pero al final, ver al modelo masculino demasiado cerca de su esposa me enojó. Después de la sesión de hoy, quería que mi esposa dejara de ir a la siguiente sesión, pero ella me convenció de que, como era mi trabajo y solo era fotografía artística, continuaría en la siguiente sesión. Pero al día siguiente, mirando a mi esposa desnuda en las manos de otra persona, él continuamente la tocaba por todo el cuerpo, haciéndome determinar que, pase lo que pase, ¡no la dejaría continuar! Ella también estuvo de acuerdo conmigo en que no iría más allí. Confié en mi esposa sin saber que ella secretamente me escondió yendo allí, incluso haciendo cosas más lascivas porque yo no estaba presente...
